El hechizo o conjuro es un acto mágico que pretende producir efectos sobre la realidad mediante procedimientos sobrenaturales de carácter litúrgico o ritual.
Cuando hablamos de magia es muy común que también hablemos del poder de los conjuros. El diccionario de la Real Academia Española en su segunda acepción dice que un conjuro es una fórmula mágica que se dice, recita o escribe para conseguir algo que se desea. Aunque el conjuro suele relacionarse con prácticas oscuras y con las fuerzas del mal, cabe destacar que es utilizado tanto en la magia negra como en la magia blanca; por tal motivo es importante tener mucho cuidado con lo que se va a pedir y especialmente a quien lo vamos a pedir.
Cuando el objetivo del hechizo es adivinar el futuro se denomina sortilegio y cuando busca someter la voluntad de otra persona se denomina encantamiento.
En la magia blanca, el conjuro es el exorcismo o las palabras litúrgicas pronunciadas para liberar a una persona del espíritu maligno que la posee.
Para la magia negra, el conjuro son las palabras o fórmulas que invocan a los espíritus de naturaleza malvada.
Los amarres de amor son conjuros desarrollados hace miles de años, estos trabajos se efectúan en santuarios sagrados y siguiendo las enseñanzas de los maestros ancestrales, hoy día se han convertido en una opción válida para lograr vivir en amor y felicidad. Deja atrás esas creencias limitantes y prejuicios sobre la hechicería, abre tu mente, si deseas que te acompañe en este camino de búsqueda de soluciones.
Gracias por compartir este tema. A veces es mejor consultar en persona acerca de estos temas con alguien que tenga la capacidad de explicar de manera sencilla estos temas.